viernes, 30 de julio de 2010

No hay trompetas...

Cerraré los ojos con tus besos, aunque ya lo hago imaginándolos…pero no lo prometo si algún día te tengo pegado a mis labios…me cercioraré entonces que no estoy soñando…
En las noches, mis manos, que tienen autonomía propia, me despiertan dolorosas…han estado buscándote en mi cama. Pobres, ellas que no duermen, no saben lo que es cerrar los ojos y volar a tu lado en la imaginación.
La almohada está empapada de anhelos…desea más que nadie darte descanso a mi lado…y eso que aún no te conoce…pero son tan lindos mis susurros sobre ti…que desespera sin tu reposo.
Me he dedicado en las mañanas a recoger rayos de sol para calentar la distancia que nos separa…alguno te he enviado, pero no se si serán suficientes para traerte a mi lado. Desde tan lejos, no creo que alivien el frío que irá, seguro, trepando como hiedra alrededor del pequeño muro que se construyó en sólo una noche, en sólo un momento…y como en Jericó caerá, sin embargo, ante el silencio.

domingo, 11 de julio de 2010

Sin dirección.

Necesito que se me enfríe el corazón para pensar con claridad. Porque la sangre que lo calienta hierve demasiado últimamente y he dejado de volar…me has robado las alas…y los labios para contarte…estoy en silencio, porque las palabras son tantas que se pelean por estar en el papel…en la boca se me desmoronan.
No saben construir frases y me parecen arquitectas de la nada…delineantes de paisajes ilusorios, de los cuentos de mis sueños…en los que necesito finales felices, proyectos finalizados en piedra y no en carboncillo.
Estamos conociendo el camino, pero se me hace t a n l a r g o…no estoy acostumbrada a los grandes trayectos…los eliminé de mi lista de lugares a visitar... ¿qué destino me llevó a tu isla en la que sigo buscando sobrevivir?
Entiéndeme, estoy perdida en esta expedición porque hace tiempo que tiré el mapa que me daba las indicaciones correctas. No soy sedentaria, vivo en las nubes…y me guío por una brújula que marca un Norte que desconozco si llega a tu puerta.