viernes, 26 de diciembre de 2008

Evasión.

Dios se sentó hoy a mi lado en la guagua. Lo reconocí por su aureola, redonda y brillante encima de su cabeza.
-Demasiado peso encima- pensé-, y él claro, al escuchar mis pensamientos, clavó sus ojos en mí. Con vergüenza, levanté mis hombros en un gesto que expresaba “siento haber sido tan sincero”.
No tuvo más remedio que bajar su mirada derrotada y asentir con la cabeza ante mi verdad. No era mi intención ser tan cruel, pero claro, ¡quién espera que Dios se siente a su lado y empiece a escuchar sus reflexiones!…
Mi cerebro echaba humo al bajar en mi parada, durante todo el camino intenté no tener pensamientos impuros. Y creo que el Diablo iba en el asiento trasero, porque no paró de reírse ante mis frustrados esfuerzos.

domingo, 21 de diciembre de 2008

Sin infancia.

Si no tuvo usted infancia, oposite para registrador. Así rezaba el cartel, al estilo del tío Sam americano, que me atraía inexplicablemente. Las proporciones eran enormes, y habían acertado al colocar un modelo robótico biónico de última generación como reclamo.
La posibilidad de optar a puestos oficiales era ridícula para un humano, desde hacía años, estos escalafones estaban ocupados por entes de alta capacidad, reprogramables y actualizables, cuya función era estar al día del amplio marco legal.
Siempre pensé que la revolución robótica humanoide se nos había ido de las manos…y no me equivocaba. Hasta los robots tenían que trabajarse su lugar en este viejo mundo.

lunes, 15 de diciembre de 2008

En el final de la rima.

Lo que más le fastidiaba de las novelas que solía leer eran, invariablemente, sus finales. Como esos donde, desde la mitad, sabes que el mayordomo es el asesino. O esas películas, donde el cadáver siempre aparece flotando en la piscina de una mansión. Esas ideas obvias la frustraban. Parecía que el imaginario de muchos, no caminaba más allá de esos patrones tan utilizados.
Así que se propuso participar en aquel concurso literario, promovido por la biblioteca pública de la ciudad. Quería encontrar un final que la dejara totalmente satisfecha.
Era todo un reto, porque aunque devoraba todos los libros que caían en sus manos, nunca se había propuesto formar parte de ellos. No como creadora.
Así que salió aquella tarde en busca de la inspiración. De ese halo luminoso que marcara su imaginario.
No sabía exactamente dónde buscar…qué encontrar merecedor de ser retratado en el papel, pero no descansaría hasta localizarlo.
Comenzó examinando las heridas de los árboles del parque, tan marcados por el amor.
Buscó entre las tablillas de los bancos de madera, donde a veces, se encuentran vidas por revelar, como esos: “aquí estuvo…”
Abrió las puertas de miles de baños, donde todos hemos fijado algún mensaje que merece ser meditado.
Caminó entre las paredes de los edificios, apreciando cada detalle de los graffiti que los visten de color.
Se asomó a los diques de la costa para escuchar al mar romperse contra ellos…y la danza de las gaviotas que permiten al viento ulular entre sus alas.
En la puerta de un colegio reconoció la algarabía de la inocencia y encontró la ilusión del futuro que está por llegar.
En una de las plazas, saludó a las diferentes edades de la vida. Y descansando en la terraza de un bar, imaginó el país del café.
Mientras hablaba por teléfono descubrió el cielo que la miraba, no tan azul como esperaba, pero siempre hermoso. Y entre el mapa de sus pies, las baldosas y el asfalto que nos guían.
Por la avenida principal experimentó el teatro del artista: desde los mimos que crean el movimiento con la voluntad, a los músicos que encadenan notas por tu camino.
Junto a las campanadas de la iglesia, escuchó canciones de gargantas de carnaval. Y en su cara pudo dibujar la imagen de un antifaz.
Impregnada por todo aquello, se sintió satisfecha y emprendió la vuelta a casa. Allí le esperaba la tarea más ardua: crear.
Sentada frente a la pantalla, y con un sándwich en la mano para alimentar su imaginación, comenzó la lucha contra las letras del teclado. De ellas tenía que sacar la historia con aquel final excepcional.
Y aquí me encuentro ahora frente a ti. Con esta historia sin final inventado y un principio establecido. Con esa imagen de la chica flotante que nada tiene de expectante. Con rimas fáciles en mi historia para hacerla más irrisoria.
Mi final va más allá de este papel. Lo traspasa y llega hasta ti. No hay mejor final que aquel en el que tú, formas parte de la historia. Porque delante de mi pantalla sentada, luchando con mi teclado, te he encontrado después de mi larga búsqueda. Te he imaginado. Tú, eres mi FIN
.

jueves, 11 de diciembre de 2008

Imagina Nos.

He vivido mil vidas. Situaciones incontables, por innumerables e inenarrables. De esas que se quedan entre mi interior y mis párpados. No salen más allá.
Sucede sin querer…carece de orden en sus acontecimientos.
Imaginación y Memoria se ayudan y complementan…y así crean la Ilusión, que llora desesperada por el trabajo que le dan.
Mis párpados abiertos, mis ojos cerrados.
Estas y no estas.
Eres tú y también otros. Y en todas mis vidas te amo, le amo…nos besamos. Cientos y miles de veces. Contigo, con cientos, y otros.

martes, 9 de diciembre de 2008

Entrecuentos.

No consigo recordar qué es un hada. He ido a consultar con el espejo mágico, y ante la frase “espejito, espejito…”, en pocas palabras, me ha mandado a paseo. Ante mi frustración, decido visitar al mago de Oz, y tras un cansino viaje por la senda de baldosas amarillas, no consigo de él más que un par de viejos zapatos rojos que me han transportado hasta la casa de una tal Dorothy. Y aquí me encuentro ahora, perdido en una granja de Kansas, con un perro llamado Toto meándome los dichosos zapatos que, por mucho taconeo, no saben llevarme de vuelta al país de Nunca Jamás.

domingo, 7 de diciembre de 2008

Seis.

Sentada sobre la inopia del amor besó mis labios secos. Los hidrató con agua de un manantial mágico que pese a estar cerca, me costó encontrar toda una semana. Con deseo hizo ruborizar los capilares traidores de mis mejillas y quedé prendida a una foto robada, a unos labios ansiosos, al desconocido destino.
Y cuando de nuevo me encontré cerca de la zona prohibida, un satélite envidioso y desesperado me separó del calor de tus palabras, encerradas, ebrias e infantiles…así me quedé. Como la lluvia de Noviembre…fría. Y la sed no sacio.

miércoles, 3 de diciembre de 2008

Príncipes rollizos.Princesas arrugadas.

Los niños jugaban a atrapar la luz. Las niñas la eterna juventud. Así, entre la magia y la irrealidad, soñábamos con ser cazadores valerosos y princesas inmortales.
Los enemigos intentaban que imperara el reino del mal y las arrugas de las brujas. La estrategia se concentraba en las espadas invencibles que almacenaban la luz del poder y el amor verdadero.
El patio se convertía en escenario de nuestra aventura interminable. La hora del timbre sólo la posponía para el día siguiente.
Nunca supe el final de la historia…supongo que, sin darnos cuenta, venció la madurez.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Desde mis ventanas

Y a través de mis ventanas entra el Sol, que calienta mis manos entumecidas pegadas al cristal de la estrecha estancia. Y mis ojos no paran de buscarte en mi jardín. Entre las flores, entre los árboles y más allá…entre los valles del fin del mundo. Las mariposas cargan mis deseos interminables, y en la noche, las luciérnagas me permiten mantener la vigilia, mientras la Luna me cuenta leyendas celestes.
Al amanecer, los pájaros despiertan y todo comienza de nuevo. El repiqueteo de sus picos contra el cristal deseando probar las migas que te traerán a mí. Intentan embelesar mi espera con sus trinos y distraer así mi atención del camino. Pobres, no conocen de mi constancia.

viernes, 28 de noviembre de 2008

Mi verdadero amor.

Mi verdadero amor es constante. Loco. Espontáneo. Conoce poco de normas y busca mi atención continuamente. Me despierta cada día con húmedos besos, y pese a mis negativas producidas por el sueño, es perseverante y siempre consigue lo que quiere.
Posee un cuerpo atlético, gracias al ejercicio y a la dieta. Tiene unas extremidades poderosas, y destaca por su agilidad y rapidez. Sus manos como garras me defienden del peligro, y en ellas oculta un aroma que me atrae inexplicablemente.
Su cabello combina tonos, moreno y castaño…que unido a las canas de su pecho le dan un toque irresistible. Y en su rostro alargado, sobresalen su nariz y sus ojos avellana, que caen tristes y almendrados…imposible no perdonarle.
Mi verdadero amor tiene nombre…Francisco, Pancho para los amigos. Nunca ha habido perro más fiel.

jueves, 27 de noviembre de 2008

El buscardor de setas.

Es real. Vive lejos de esta isla, a veces creo que en otro mundo, a veces, que mi capacidad imaginativa lo creó para evadirme.
Nos encontramos hace años en un viaje, durante el cual, fue robando partes de mí.
Comenzó por quitarme los ojos en un combate de miradas que me fue imposible ganar. Se quedó con ellos como trofeo.
No contento con esto, se apoderó de mis pies, los ató a unas cuchillas y constantemente, se deslizan sobre el hielo de su corazón.
Para evitar el calor me cortó las manos. La derecha mientras paseaba por un puente con una torre, la izquierda, se la guardó en un bolsillo de su chaqueta. Y por último mis labios y mi lengua, que quedaron pegados a un dedo de su mano mientras volábamos de regreso al origen de los días.
Y heme aquí, escribiendo con la memoria, atenta al sonido de mi vida…es lo único que me queda.
Mientras él, camina solitario por los humedales de su vida, en busca de setas que yo le regalé un día.

martes, 25 de noviembre de 2008

Posesión.

Silencioso…shh, sigiloso…a través de los espacios vacíos y olvidados de tu ser, voy cobrando fuerza desde lo profundo. Al cerrar tus ojos…voy creciendo, sin descanso.
En esta eternidad que me ha tocado sufrir, pocos amaneceres me han excitado. Vidas huecas que ni siquiera me han sentido llegar. Soy mitad…
Y tus lágrimas no te ayudarán, no te liberarán.
Escucha por última vez la vida que te recorre. Siente a través de tu piel el cuerpo que ya casi es mío.
La memoria que te da vida desnudaré…y nunca más serás. Sólo apagado capricho de mí recuerdo.
Me anudaré a tu garganta y ensordeceré tu llanto, para que el viento sólo arrastre la agonía de tu mutismo. Yo seré tu último beso…y después…oscuridad.

lunes, 24 de noviembre de 2008

Abrí las alas

Se llamaba Dié (mariposa) y residía en la ciudad de Chengdu, provincia de Sichuan. Con apenas ocho años, tenía una concepción madura de la vida, aunque limitada. Nada más allá de los muros del orfanato Qín (ave) en el que residía.
Ayudaba con los bebés, dentro de su labor diaria. Les daba de comer, los cambiaba y aunque el desarraigo y la falta de atención, eran el pan de cada día, intentaba que el sufrimiento fuera menor con algún arrullo.
Cuando podía, se escapaba al patio trasero, donde había un viejo árbol en el que algún pájaro se posaba de vez en cuando. Soñaba con volar…
Aquella mañana era aún más triste si cabe. Otro de los bebés no había aguantado la realidad de venir a un mundo injusto. Desistió sin tan siquiera luchar. Llegaban y se iban, algunos, con un poco de suerte, con una familia. Siempre elegían a los más pequeños, por lo que había perdido toda esperanza. Sabía que no iba a salir de allí hasta cumplir la edad permitida o…abandonar.
Por eso, cuando la llamaron a la habitación de las visitas, se sorprendió. Al parecer, un matrimonio extranjero la había visto por el recinto y querían conocerla.
Dié nunca tuvo ilusiones más allá de ver volar a sus pajaritos. La esperanza se escondió detrás de unos muros grises que la envolvían…hasta que una mujer, de ojos almendrados, cogió su mano, sonrió y con sus brazos, la arrulló.
Y Dié voló. Aquel pájaro enorme la llevó a un país lejano llamado España. Los muros grises se transformaron en una habitación con mariposas de colores. La tristeza en esperanza, y la desilusión en sueños. Lo más difícil fue el idioma, que superó con la ayuda de su hermano Iván, sólo un año mayor. Aprendieron juntos prácticamente.
Recordaría tiempo más tarde, desde una perspectiva lejana, y totalmente consciente de su pasado, las palabras incoherentes que su madre pronunció al conocerla:
- Hija. Llevaba tanto tiempo buscándote.

sábado, 22 de noviembre de 2008

la pesadilla de la realidad

- Entonces, ¿cómo podemos saber que esto no es un sueño?- decía Ana.
- Pues despertando- contestó Eduardo.
- ¿Y si no quiero despertar?, si quiero permanecer eternamente aquí contigo, ¿qué tengo que hacer para evitar la separación?
- Ana, no puedes vivir eternamente en un sueño.
Y despertó…
En esa realidad, su cuerpo respondía dolorido. Las lágrimas cayeron por su rostro al recordar ese ideal en el que su cuerpo vivía, su corazón palpitaba y el amor era posible junto a él. Donde nunca existió un conductor, un coche, una curva y un accidente.
- ¿La vida es sueño?- pensó - ¡Y una mierda Calderón!

viernes, 21 de noviembre de 2008

Poeta encubierto

No sabía que aquel culo era un corazón dibujado en su honor, porque ¿cómo decirle a Elsa que la quería sin quedar delante de los otros como un imbécil? Así que dedicaba su tiempo en hacerle mil y una perrerías para llamar su atención. Sus amigos le reían las gracias y ella, para su pesar, lloraba en el recreo desconsolada.
Lo que desconocían era que tras cada travesura, el escribía cartas de perdón que nunca se atrevió a enviar, en las que además, declaraba su eterno amor.
Así que hoy, Elsa, me redimo desde aquí. Me declaro cautivo de tu amor y poeta de tus besos…tirón de coleta.

jueves, 20 de noviembre de 2008

atracadores

-¡Niño, tira pa’ Linares!- gritó al entrar en el coche.
Entre nervioso y perplejo aceleré dejando marcado el asfalto.
Manuel secaba el sudor de su cara con un billete de 500, ¡realmente existen!- pensé mientras reía a carcajadas exaltadas.
Habíamos meditado mucho el proceso del golpe, y ahora corría a toda velocidad por las calles de Granada.
-¡Oh Dios!, ¡maldito chiquillo en bicicleta!-tuve que frenar bruscamente. Perdí el control. Manuel y yo salimos disparados a través de la luna del coche.
Y…
-¡Corten! La toma no vale. El chiquillo entró demasiado pronto en escena...
¡Estoy más que cansado de atravesar ese cristal!

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Viajero del pasado

Diario de bitácora: Año 3020. Diciembre. Día 24.
Me convertí en viajero del pasado para poder reconstruir pedazos de historia que no tienen respuesta. Antropólogo de vocación y cosmonauta por casualidad, me encuentro en mi transbordador rumbo a una época cismática en cuanto al clima se refiere.
Intentamos encontrar las causas de nuestra crisis medioambiental y actuar desde su origen para cambiar el producto del futuro.
Buscamos esperanza para la humanidad que agoniza. Fuimos irresponsables y estamos pagando por ello. Las posibilidades de vida en otros planetas, no enmienda los fracasos que cometimos aquí.
Mi destino, la Barcelona del 2053. Nochebuena. El mal tiempo es un buen camuflaje.
Integrarnos será clave. Buscar la solución nuestra misión.
Esperamos volver.
Cierro diario.

martes, 18 de noviembre de 2008

Ocho

Eran dos atados a un teléfono en el fin del mundo. Bla, Bla, Bla (…) Eran dos desconocidos, Bla, Bla, Bla (...). Luchaban en el mismo bando contra las retenciones, guiando sus vidas por el método Chuck, un arte en el que aprendes a dar patadas sin recibir rasguños, Bla, Bla, Bla (…) ella era la peor alumna, así que la vida quiso que entre dibujos e historias compartieran natillas.
Él es un gran maestro, gran amigo y ella no se lo dice mucho, así que…Bla, Bla, Bla…

lunes, 17 de noviembre de 2008

Cuatro

Cuatro y media de la mañana:
-Hola… ¿qué haces?
Tenía por costumbre comunicarse de madrugada, cuando todos duermen.
Durante un mes el deseo fue intenso, mutuo…hasta que ella entró en el estado del miedo. Es ese país en el que uno cruza la frontera y en lugar de encontrar esperanza, se reencuentra con sus miedos…y colgó.
Cuando él llamaba…comunicaba.
Ella quería, y a la vez no…y otra llamada se interpuso, y así…se acabó.
En la distancia se quieren…y con el viento se envían risas, canciones y besos.

domingo, 16 de noviembre de 2008

Inocente

- Aquel era yo. El que te dio la mano tímidamente y te robó tu primer beso. El que más tarde enrojeció al traerte una flor pidiendo perdón. Ni siquiera me miraste. Simplemente la aceptaste y saliste corriendo.
Por el camino a casa le conté a las nubes que te había besado. Di gracias a las flores por ayudar en mi súplica y le grité al viento hasta dónde llegaba tu belleza. Y esperando el nuevo día me dejé dormir pensando en ti.
- ¿Realmente eras tú?
- ¿Lo recuerdas entonces?
- Aún conservo la flor entre dos pliegos de papel.

Tres (de piratas y forajidos)

¿La culpa?...sobre todo de los lazos que atan demasiado…que ahogan imperceptiblemente…que de forma invisible se alimentan del miedo al amor…ella sintió el miedo y huyó. Lo dejó súbitamente. Salió corriendo un amanecer oscuro y no volvió junto al ladrón de besos.
Y la víctima se convirtió en forajido, y el pirata en corazón roto. Y en ocasiones se encuentran. Y en ocasiones se hablan. Y en ocasiones los besos se los roban a la madrugada.

sábado, 15 de noviembre de 2008

Cinco (Parte III)

- ¿Soy el cinco?
- Eres el cinco.
- ¿Y por qué el cinco?
- Porque estas en medio.
- ¿Eso soy para ti?,¿un número?...
- Para mí al menos eres más…Yo para ti, aún me pregunto ¡qué coño soy!
Silencio…como el cinco, siempre en medio.

viernes, 14 de noviembre de 2008

Cinco (Parte II)

Vivía en un búnker sin luz, donde continuamente se proyectaban películas de guerra. Tanta violencia, le había ido transformando en un ser impasible. Comenzó en una zona localizada de su espalda, no sentía nada…y se fue apoderando del resto de su cuerpo. Sus extremidades, su cabeza y por último, el corazón. Era una coraza en la que si golpeabas, rebotabas. Nada entraba, casi nada salía.
Y ella seguía intentándolo…pum, pum, pupum. Golpes al corazón.

jueves, 13 de noviembre de 2008

Cuando fuimos niños

- Aquel niño era yo- y señaló con su anciano dedo la foto gastada por los años.
En ocasiones, cada vez menos, tenía esos momentos de lucidez.
- Y esa que está a mi lado se llamaba…- hubo un breve silencio mientras su memoria luchaba contra la enfermedad que intentaba eliminarla.
- Se llamaba Lucía, si. Fue mi primer amor, mi primer beso…- dijo alzando su cabeza y cerrando sus ojos. Supongo que evocaba el momento…
- ¿Y dónde está hecha la foto abuelo?, no parece el patio de un colegio...

Cuando me miró, el recuerdo ya no estaba. Y mi abuelo tampoco.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Dos

Vive en un reino oscuro, alejado de la realidad en una capa de humo. Se alimenta del autocontrol y no deja que nadie descubra la caja negra de su pensamiento.
Por casualidad, a ella se le cayó el corazón y él lo recogió. Se lo guardó en un puño, para que no escapara, y a través del correo va recibiendo trocitos machacados de su amor.
En ocasiones, desde su caverna, se asoma a mirarla…y ansiosos ambos por encontrarse, saben que, entre la bruma y los pedazos, aún queda esperanza.

martes, 11 de noviembre de 2008

Lienzo en blanco

Mira el lienzo escondido tras la tela que lo cubre…sus ojos lo escrutan buscando eso que sólo ella es capaz de vislumbrar…lo que realmente está dentro de la obra…más allá de forma, color o fondo…
La obra está viva…
De frente a él lo descarga del peso que lo oculta…para que pueda respirar y así engañarlo…no eres libre…piensa…eres mío y sigues atrapado en tu finitud….esto, sólo es una libertad breve para tus intenciones…para que cobren sentido sobre la nada…para que el espacio se convierta en forma gracias a la mirada y se produzca la magia…
De inmediato regresa a su frustración, que se transforma en rabia contenida por el lienzo que la atormenta…lo cubre de nuevo…regresa al estado del autocontrol…regresa a la tranquilidad de la invisibilidad incierta…quiere sentir su superioridad sobre él…sin mí no eres…sin mí…te mueres…sin haber sido más que parte de mi pensamiento….me necesitas…
Te necesito…
¡Sal de tu escondite maldita!...corre por mi brazo y haz que mi mano te de vida…sal de mi imaginario…de mi sueño embelesado y formemos un solo ser…no me dejes aquí sola…no me dejes en blanco…
Con el pincel en la mano se enfrenta al vacío de nuevo desnudo…a la frustración de las ideas inexistentes…al rencor de su ineficacia…a la pesadumbre de la victoria del lienzo que la observa…sin mirada pero expectante…sin valor pero anhelante…
Y cae en la locura…la demencia se apodera de ella…no soy…no seré…has vencido…y mientras sus lágrimas caen, ríe a carcajadas…la enajenación la lleva a desangrar sus venas y tira el lienzo con rabia…y la sangre corre…y ella muere…y el lienzo… ¡gana!…porque mientras el sueño eterno se apodera de ella…la tela absorbe su vida descarnada…y se cubre de rojo…pasión…

lunes, 10 de noviembre de 2008

Cinco

Se convirtió en rutina de pensamiento continuo. Incertidumbre ante su razonamiento enigmático. Descifrando frases sordas, propósitos invisibles.
Le respondía arrítmicamente, pum…pum…pupum…y es que cinco segundos son muchos sin pestañear.
Entre sus palabras se transformó en color, porque movía el arte…y también en amor, que siempre es incógnita cuando no hay valor.

Y entre las almohadas, sigue soñando con besos…

Uno.

Con aviso previo. Vino y se fue. Pero en el transcurso, pasó toda una vida para descubrir que al final todo acaba. La maleta que arrastraba no sólo se rellenó con su ropa, también con recuerdos, sentimientos…y todas esas cosas que uno guarda, y que, como ese par de zapatos viejos y cómodos, no quiere dejar.
Al final no queda nada…ni siquiera un amigo. Todos se van con la maleta. Y solo, comienzas a gatear.
Rehizo su vida. Creció de nuevo. Aprender era más fácil (venía con experiencia). Y camina…
Yo aún balbuceo.

domingo, 9 de noviembre de 2008

Al terror nocturno

Mientras no crea en mí.
Mientras ella duerma tranquila…la observaré…vigilaré cada uno de sus movimientos desde la oscuridad…y no me verá desde su luz…porque es mi mayor enemiga.
Mientras ella no crea en mí…tendré poder…estará entonces a mi merced.
Y una de estas noches asomarán a mi centenario rostro las ansias…mis ojos hipnóticos la harán estremecer…tal vez de dolor…tal vez de placer.
La asiré entre mis brazos y con ellos haré un nudo que la ate a mi cuerpo…notaré palpitar…acelerado…su corazón…y sentiré…su sangre…correr nerviosa por sus venas.
Su cuerpo reaccionará ante el peligro…pero se dejará llevar por la voluptuosidad del momento…y acabará deseando que mi veneno mortalmente vívido la posea.
Y mi último deseo será acariciar con mi aliento su dulce cuello…antes de que a golpe de mandíbula y colmillo la haga mía para siempre…