viernes, 28 de noviembre de 2008

Mi verdadero amor.

Mi verdadero amor es constante. Loco. Espontáneo. Conoce poco de normas y busca mi atención continuamente. Me despierta cada día con húmedos besos, y pese a mis negativas producidas por el sueño, es perseverante y siempre consigue lo que quiere.
Posee un cuerpo atlético, gracias al ejercicio y a la dieta. Tiene unas extremidades poderosas, y destaca por su agilidad y rapidez. Sus manos como garras me defienden del peligro, y en ellas oculta un aroma que me atrae inexplicablemente.
Su cabello combina tonos, moreno y castaño…que unido a las canas de su pecho le dan un toque irresistible. Y en su rostro alargado, sobresalen su nariz y sus ojos avellana, que caen tristes y almendrados…imposible no perdonarle.
Mi verdadero amor tiene nombre…Francisco, Pancho para los amigos. Nunca ha habido perro más fiel.

2 comentarios:

Con vistas al jardín dijo...

Panchitoooo!!, igualito que su ama. Que tienes al perro loco de la cabeza. Si al final va a ser cierto eso de que lo perros terminan pareciendose a sus amos. A este solo le falta la melena!!!
Besotes migarrr!!

Magda dijo...

Ohhh que bonito!! Tia me siento identificada contigo, a mí me pasa lo mismito pero con Rinti, por cierto, un perro mucho más bonito que Pancho, jajaj!!
...Y que bien huelen sus patitas!!